"No hay que regalar las palabras nobles a los canallas" Osvaldo Soriano

"No hay que regalar las palabras nobles a los canallas"  Osvaldo Soriano
VIERNES - 7 pm - www.fmurquiza.com - FM 91.7

CIELO Y TIERRA en la Blogosfera

Hemos creado este blog, a partir de nuestro programa de radio "Cielo y Tierra", para intercambiar reflexiones, experiencias y propuestas.

Nuestra esperanza es que este encuentro favorezca la construcción conjunta de una comunidad sostenida por la solidaridad, el respeto mutuo, la promoción de los derechos humanos y la mejora en el sistema político en favor de una democracia plena.
Intentamos por Cielo y Tierra:

* Despertar la solidaridad, la reflexión, la toma de conciencia y el respeto mutuo, como ejes de una convivencia social en armonía, equidad y justicia.
* Fortalecer el juicio crítico y la conciencia social
* Difundir el pensamiento mariteniano aplicado a diferentes perspectivas que componen la sociedad, (cultura, política, economía, salud, ciencia y tecnología, diálogo ecuménico e inter-religioso)

Hagamos del encuentro una oportunidad para conocernos, enriquecernos y hacer posible una sociedad mejor para todos.
Te esperamos todos los viernes a las 7 de la tarde en www.fmurquiza.com FM 91.7 para compartir una charla entre amigos, acompañada de muy buena música étnica y literatura en nuestro idioma.

Claudia Santalla y Giselle Zarlenga

jueves, 3 de mayo de 2007

HISTORIA DE UNA BALA ESPECIAL

Yolanda jb / Miércoles 24 de enero de 2007


El texto que presentamos a continuación, de la periodista Oriana Fallaci, es una crónica enviada desde Vietnam durante la guerra de este pais donde se evoca el terrible poder de las armas y las responsabilidades compartidas en su creación y fabricación.

“Se trata de una pequeña bala del fusil M-16. Una, una sola, basta para matar a un hombre: no es necesario disparar a ráfagas. Ello es posible porque viaja a una velocidad muy cercana a la del sonido, y mientras viaja está siempre en el límite del equilibrio. Cuando llega a su destino no se para en la carne como hace una bala honesta, no, y ni siquiera atraviesa un brazo o una pierna no; ésta gira sobre si misma, se retuerce, rasga y corta y en bien pocos minutos vacía toda su sangre. ¿Sabes por qué hay tan pocos heridos entre los vietcong? Porque normalmente los vietcong resultan heridos por los M-16 y, por consiguiente, no permanecen demasiado tiempo heridos: mueren siempre. Ten, aquí tienes la balita: llévatela contigo a Nueva York, como recuerdo. Mientras la admiras piensa que fue estudiada durante mucho tiempo. Inicialmente no lograban encontrar la pólvora adecuada, pero luego la hallaron finalmente: se trata de pólvora Dupont, porque la Dupont no deja residuos dentro del fusil...”

“Coge la balita y admírala. Realmente está bien hecha. ¿Quién la habrá inventado? La inventó un hombre. Un día ese hombre se puso a ello con su paciencia, su ciencia, su fantasía, su tecnología calculó forma, peso, velocidad, trayectoria, momento de impacto, y tras todos esos cálculos realizó un diseño, escribió un proyecto y lo ofreció a un industrial. Y el industrial lo examinó con interés, llamó a sus técnicos y les pidió que realizaran un prototipo de prueba de la balita, pero con el mayor secreto, no fuera que otro industrial les robara la idea. Y lo hicieron, vaya si lo hicieron. Después, llevaron bien contentos la bala al industrial que la guardó como si fuera una esmeralda, un zafiro y dijo: Ahora, veamos si funciona. Se realizó el examen y se disparó la bala. ¿Contra quién? ¿Contra un perro, un gato, un trozo de chapa metálica? Ciertamente, no contra un hombre. Yo, sin embargo, hubiera escogido un hombre: el inventor por ejemplo, o el propio industrial, o a ambos. Y, no obstante, el inventor y el industrial están intactos; el industrial reunió alrededor de su mesa de caoba a su consejo de administración y les mostró la balita. Les propuso patentarla para producir miles de millones de balas para el ejército, que las usaría en Vietnam. Y el consejo de administración lo aprobó”.

Autora: Oriana Fallaci, Niente e cosi sia, Milán, Rizzoli, 1969.

ACTIVIDADES.

1) Lee El texto. A continuación realiza un debate con los compañeros y compañeras de clase.

2) La bala del M-16 es el resultado final de muchísimos estudios e inversiones. ¿Puedes imaginar los recursos en conocimientos, inteligencia, capital y materias primas utilizados en objetivos militares?. Intenta hacer una lista de estos recursos por prioridades. Compárala con las de tus compañeros y compañeras y juntos cread una lista sintetizada y enviadla a las autoridades.

3) O. Fallaci manifiesta que "habría probado" la bala en uno o dos hombres. Que hubieses hecho tu para intentar convencer al inventor y al fabricante de no continuar adelante con el proceso de creación de un instrumento mortal como este?

4) Investiga sobre el papel de los científicos en la industria armamentística, concretamente sobre el llamado "complejo militar industrial".

Más información sobre investigación militar: http://www.antimilitaristas.org

FUENTE: http://www.edualter.org/

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